Y como un maniqui me dedique a seguir tocando, mientras algunos decian que no sonaba a nada intente aprobechar el silencio que me dejaron para cantar, pero pocas eran las cosas que tenia que decir y muchos los sentidos que podian tomar, seria adecuado moverse?...al final solo segui tocando hasta que la madera me paro, una vez hay...podeis quemarme.mi ultima cancion...y no consegui que fuera mas fuerte que el silencio...me intimida o me intima en vosotros en ellos...quienes fueran que fuesen seguro que estaban alli por o esperando algo, que mas da seguro que esperarian a terminar la cerveza o la conversacion para que rellenase sus pensamientos, y alli estaba de nuevo como las marionetas adornando vuestra felicidad.
1 comentario:
Quizás alguien miró a la marioneta y supo entender y sentir sus inquietudes, sueños, miedos, deseos. El creador (de música, literatura, arte o lo que sea) tiene el poder de transmitir y agrupar en la bolsa de emociones que lleva al hombro, a muchas personas que estén dispuestos a compartir con él su creación.
Pedro, guapo..ya era hora de que dejaras caer por aquí algún texto bueno de los tuyos. ¡¡No tardes tanto la próxima vez!!
Muchos besossss
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